Todos y cada uno de los procesos evolutivos del hombre se basan en la autodeterminación. No conocereis ninguna faceta extrapolable ,en la que no exista la premisa básica de la supervivencia del ser humano como el motor intrínseco para la evolución. Hoy voy a hablar de construir un mundo nuevo desde el optimismo pragmático. Como apunta Mark Stevenson,cofundador de Arbourban,que afirma que el sistema o la actitud que rige la actual constitución sistemática es el cinismo. Para cambiar el mundo,necesitamos pensar como ingenieros y no como piensan nuestros políticos. A propósito de todos y cada uno de los escándalos de corrupción que sacuden a este país llamado España. Casos de corrupción, cohecho y prevaricación que rige nuestro corrompido sistema político. Es escandaloso e inverosímil que esto suceda y siga sucediendo sistemáticamente y que sea la ciudadanía la que sufra las consecuencias de un sistema obsoleto y carente de expectativas de presente y futuro halagüeñas. Un sistema ya demostrado que no funciona sí para robar y delinquir hasta agotar los recursos y arrasar desde el cinismo ambicioso de nuestro sistema político engramado y aberrante de esta clase política sin principios ni catadura moral .Es este sistema infuncional el que ha creado una gran crisis perdurable en el tiempo que nos deja sin tiempo ni espacio. Y que corrompe los cimientos de una sociedad desilucionada y pesimista; bloqueada y apática falta de esperanza y de sueños que alcanzar.
Desde la perspectiva optimista pragmática( no se trata de crear castillos en el aire sino de cambiar las cosas y soñar en conseguir un mundo mejor más justo y agradable para todos) podremos cambiar el mundo hemos de establecer un sistema científico como hacen los ingenieros y no como han hecho los políticos. La norma cultural del momento es el cinismo. El poseer la convicción de que las cosas pueden cambiar y trabajar desde dicha premisa constructiva y científica: podremos deshacernos del círculo vicioso y sin salida ni futuro en el que estamos inmersos . Si hacemos algo de una manera determinada y no sirve debemos cambiar la forma de realizarlo para lograr nuestro objetivo es imbécil seguir repitiendo las mismas fórmulas o tener el mismo sistema que no funciona y que nos va a llevar a la perdición.
Hemos de cambiar esta norma cultural del momento y trabajar desde el optimismo pragmático ambicioso. "Si quieres cambiar el mundo: piensa como un ingeniero".Este mundo podría ser un lugar mejor pero
para ello, necesitamos personas brillantes con optimismo; ya que es un imperativo moral: sin esperanza e ilusión no podemos empezar bién el dia. Nuestra sociedad como bién describe Stvenson en su seminario( Arbourban),nuestra sociedad es como un adolescente que no ha madurado lo suficiente para que todo el mundo se sienta realizado. La vida es una elección y podemos cambiar el mundo. Se necesita optimismo y querer hacer las cosas bién, utilizando herramientas adecuadas y un método científico.
Desde la perspectiva optimista pragmática( no se trata de crear castillos en el aire sino de cambiar las cosas y soñar en conseguir un mundo mejor más justo y agradable para todos) podremos cambiar el mundo hemos de establecer un sistema científico como hacen los ingenieros y no como han hecho los políticos. La norma cultural del momento es el cinismo. El poseer la convicción de que las cosas pueden cambiar y trabajar desde dicha premisa constructiva y científica: podremos deshacernos del círculo vicioso y sin salida ni futuro en el que estamos inmersos . Si hacemos algo de una manera determinada y no sirve debemos cambiar la forma de realizarlo para lograr nuestro objetivo es imbécil seguir repitiendo las mismas fórmulas o tener el mismo sistema que no funciona y que nos va a llevar a la perdición.
Hemos de cambiar esta norma cultural del momento y trabajar desde el optimismo pragmático ambicioso. "Si quieres cambiar el mundo: piensa como un ingeniero".Este mundo podría ser un lugar mejor pero
para ello, necesitamos personas brillantes con optimismo; ya que es un imperativo moral: sin esperanza e ilusión no podemos empezar bién el dia. Nuestra sociedad como bién describe Stvenson en su seminario( Arbourban),nuestra sociedad es como un adolescente que no ha madurado lo suficiente para que todo el mundo se sienta realizado. La vida es una elección y podemos cambiar el mundo. Se necesita optimismo y querer hacer las cosas bién, utilizando herramientas adecuadas y un método científico.
Ya es hora, de cambiar las cosas. Levantarnos del sillón de la desesperanza y abrazarnos al optimismo para lograr un mundo mejor y eso se conseguirá trabajando desde la coherencia y la valentía. Cada uno de nosotros puede contribuir aportando su granito de arena usando las cualidades y herramientas adecuadas. Todos y cada uno de nosotros posee un don para ayudar a cambiar este sistema erróneo en el que: morimos lentamente. Sjp.
